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Aplicación de la ventilación en la minería subterránea

Publicado por S&P          mayo 17, 2021          Lectura: 4 min.

La importancia de garantizar la calidad del aire se hace especialmente complicada en determinados espacios. Sin duda, uno de los casos más singulares es el que se refiere a la ventilación en la minería de interior o subterránea. Una actividad que conlleva graves riesgos para la salud y que solo pueden evitarse con la instalación de un sistema de ventilación adecuado. Actualmente existen soluciones que han mejorado notablemente su eficacia, como vamos a comprobar.

Lectura: 4 min.

La importancia de la ventilación en la minería

Un sistema de ventilación mal instalado o inapropiado a las condiciones de una mina tiene serias repercusiones en la salud de sus trabajadores y, además, conlleva unos costes económicos considerables; sin olvidar que puede originar un problema de seguridad laboral. Todos estos son motivos suficientes para prestarle la máxima atención a las decisiones que tengan que ver con la ventilación en la minería.

Y, ¿qué puede considerarse como una correcta ventilación en la minería? Básicamente es aquel sistema que garantiza un paso del flujo de aire suficiente y necesario para asegurar a los trabajadores una atmósfera limpia y libre de gases tóxicos. Es decir, la ventilación en la minería debe:

  • Asegurar un porcentaje mínimo de oxígeno, que se debe calcular teniendo en cuenta el número de personas que está ocupando un mismo espacio y sus dimensiones.
  • Ser capaz de diluir los gases tóxicos, explosivos o asfixiantes hasta un nivel inferior al marcado por la normativa vigente.
  • Incluir un sistema de climatización, ya que a medida que se desciende la temperatura aumenta. Además, los equipos con los que trabajan los mineros contribuyen a aumentar más la temperatura.

Las condiciones ambientales específicas de una mina subterránea

La atmósfera que se respira en una mina, como hemos señalado, no tiene nada que ver con la de otros espacios laborales, ni mucho menos con la de un entorno al aire libre. Son distintas las condiciones de temperatura, humedad y composición del aire. De forma genérica (porque en cada mina se dan unas circunstancias distintas), se puede establecer esta tabla de condiciones deseables:

  1. Conseguir una composición del aire con estas proporciones: 20 % de oxígeno; 78 % de nitrógeno; 0,20 % de CO2; 0,9 % de argón, y el 0,01 % restante de otros gases.
  2. Disminuir al máximo las impurezas del aire específicas que provienen de los gases de voladuras, de los que emanan las propias formaciones geológicas y del polvo producido por las tareas propias de la minería.
  3. Disminuir al máximo el grupo de contaminantes más frecuentes: monóxido de carbono, metano, gases nitrosos, ácido sulfhídrico, anhídrido sulfuroso y polvos de roca.

Finalmente, en el interior de una mina, se está expuesto a tres tipos de gases de distinta naturaleza que afectan de distinta forma a la salud:

  • Los gases asfixiantes, que disminuyen la proporción de oxígeno en la atmósfera porque ocupan su espacio al tener mayor volumen.
  • Los tóxicos, que provocan una disminución de oxígeno porque penetran directamente en los pulmones y, desde allí, se expanden al resto del organismo. 
  • Los gases explosivos, que producen distinta sintomatología, desde el envenenamiento a la destrucción de tejidos. Además, suponen un riesgo añadido, porque si entran en contacto con un iniciador, generan una explosión.

Sistemas de ventilación en la minería

Una vez descritas las condiciones propias que caracterizan una mina subterránea, analicemos cuáles son las distintas opciones de ventilación en la minería y cuáles son sus aplicaciones concretas. Los sistemas de ventilación se dividen en tres modalidades:

  • Ventilación manual, no utiliza ningún equipo mecánico o eléctrico de apoyo. Necesita de dos accesos, uno de entrada y otro de salida del aire para que pueda renovarse. Suele usarse en las instalaciones mineras ubicadas en montañas, porque en ellas se produce el desnivel necesario para mantener un flujo de aire constante circulando; pero se ve afectada por los cambios de temperatura y de presión, es demasiado cambiante como para garantizar la eficacia deseada en la calidad del aire en todo momento.
  • Ventilación auxiliar, cuenta con un apoyo mecánico (ventilador) para mantener la circulación del flujo de aire. Es el tipo de ventilación en la minería que se suele usar en galerías cortas y horizontales.
  • Ventilación principal, la que recorre todas las labores mineras (huecos excavados) mediante un circuito que trabaja con ventilación forzada. Hay que asegurarse de que se calcula bien el caudal de aire que fluye por ese circuito de ventilación. Para hacerlo, se debe tener en cuenta el número de personas que hay en la mina, las dimensiones y la sección de las labores. Pero también, el tipo de maquinaria que se esté usando y las emanaciones de gases propias de esa mina.

Este es un primer acercamiento a este asunto tan complejo sobre lo que representa la ventilación en la minería. Porque la planificación y decisiones sobre qué modelo o modelos de sistemas de ventilación escoger deben basarse en un detallado y preciso análisis de distintos factores. Finalmente, para garantizar que la ventilación está funcionando como debe en una mina, es preciso realizar constante y periódicamente mediciones de la presencia de gases, humedad y temperatura.

Porque por suerte, la época de utilizar canarios para controlar la calidad de aire en las minería de interior se terminó no hace tanto tiempo.

La importancia de una buena ventilación