El IoT es el acrónimo de Internet of Things (el Internet de las Cosas). Se lee y oye por todas partes, pero ¿a qué se refiere exactamente? Hasta dónde llega esta nueva práctica y cómo va a cambiar nuestra forma de vida es lo que analizamos a continuación.
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El fenómeno del Internet of Things (IoT)
Cuando se hace referencia al IoT, de lo que se habla es de toda la tecnología que permite que estemos interconectados entre nosotros y con todo lo que nos rodea. Por supuesto, la aparición de Internet y, sobre todo, la posibilidad única que nos ofrece de estar permanentemente conectados, capturando datos e intercambiando información, es la clave que explica esta nueva manera de estar en el mundo.
Utilizamos el Internet of Things continuamente, incluso aunque no lo hagamos de forma consciente. Por ejemplo, cuando viajamos en coche y usamos una aplicación que nos sirve de mapa a la vez que nos proporciona información sobre el estado del tráfico o la ubicación de una gasolinera. También cuando salimos a entrenar y utilizamos un sensor que registra tanto nuestras constantes vitales como las marcas de velocidad y distancia que conseguimos. O incluso, para tener controlado en todo momento a nuestros hijos a través de la ubicación que nos proporciona su móvil.
Pero el ámbito de influencia del IoT va más allá. Nos permite controlar el termostato de nuestra casa para optimizar el gasto de energía sin renunciar al máximo confort, así como desplegar o recoger las persianas de nuestra vivienda y actuar sobre muchas más actividades que tienen lugar dentro de nuestro hogar. Esta función concreta relativa a nuestra vivienda, es lo que se denomina domótica. Todo un universo de posibilidades que no ha hecho más que iniciar su desarrollo.
El IoT de las empresas
Si el Internet of Things está suponiendo toda una revolución a nivel personal, su influencia en el ámbito empresarial es igual de decisiva. Está modificando la manera en la que se desarrolla el proceso de producción, con una optimización de los recursos. Y por supuesto, supone una transformación en la interacción con los clientes, gracias a la cantidad ingente de datos sobre los hábitos de consumo y preferencias que proporciona casi en tiempo real.
No hay sector empresarial en el que no se esté implantando el Internet of Things. En las compañías dedicadas a la logística, por ejemplo, es un protagonista imprescindible. Nunca antes fue posible hacer un seguimiento tan completo y constante de cada paquete o artículo. Algo similar ocurre en el ámbito del Retail o Comercio Minorista, que puede saber en todo momento cuáles son las demandas reales de los consumidores y reaccionar para cubrirlas. Incluso las empresas dedicadas a la agricultura comprueban a diario las ventajas de implementar el IoT en sus producciones, con sensores que controlan el riego, la temperatura o la recolección.
Un Internet of Things que mejora nuestra salud y bienestar
La generalización del IoT es, como hemos repasado, un avance indiscutible que simplifica y mejora nuestra vida, a la vez que contribuye al desarrollo empresarial. Concretamente, si hay un ámbito en el que son impresionantes los resultados de trabajar con IoT es el energético. Y como consecuencia, su papel insustituible en las políticas de eficiencia energética y cuidado del medio ambiente. Conceptos como el de las Smart Cities serían impensables si no contásemos con el Internet of Things.
En este sentido es interesante reparar en un apartado concreto, el que se construye en torno al binomio IoT-ventilación y lo que representa como valor añadido para nuestro confort y bienestar. En especial en estos tiempos, cuando la experiencia de haber vivido una pandemia nos ha demostrado hasta qué punto son esenciales los sistemas de ventilación que garantizan la calidad del aire que respiramos.
Gracias a la interconexión que pone a nuestro alcance el IoT, se han podido lanzar plataformas destinadas a la automatización y control remoto de los sistemas de ventilación mecánica que se instalan en viviendas y en empresas. El objetivo de estas plataformas, como la que hemos desarrollado en S&P con el nombre de Connectair, es poner en marcha el formato de ventilación inteligente. Un proyecto tecnológico que hace posible monitorizar los niveles de calidad del aire de una vivienda o empresa en todo momento e interactuar con el sistema de ventilación desde cualquier dispositivo, incluso usando asistentes de voz como Alexa.
El Internet of Things es un fenómeno que no tiene vuelta atrás. En la actualidad, se calcula que los dispositivos conectados por IoT superan los 31 000 millones en todo el planeta. Una realidad silenciosa de la que todos formamos parte y que solo ha empezado a mostrarnos hasta qué punto viene a transformar todo lo que hacemos.
