¿Puede la falta de ventilación en los colegios y, por lo consiguiente, la mala calidad del aire dentro del aula impactar en el rendimiento escolar de los alumnos? Algunos estudios parecen confirmar que sí, que más allá de problemas de salud y contagios, la calidad del aire puede tener un impacto significativo en la concentración, la productividad y el rendimiento académico de los estudiantes.
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En este artículo, te explicamos cómo afecta la IAQ (calidad del aire interior) y la concentración de altos niveles de CO₂ en los estudiantes y cuáles son las recomendaciones oficiales. También veremos las ventajas de una buena ventilación y qué opciones hay para mejorarla.
Relación entre ventilación en colegios y rendimiento escolar
Según un estudio de la Universidad de Harvard, la concentración de gases de CO₂ mayores a 1000 ppm (partes por millón) en el aula puede hacer que los estudiantes se sientan somnolientos, y experimenten efectos secundarios como la falta de concentración, aumento del ritmo cardíaco e incluso náuseas.
Por otro lado, la falta de una correcta ventilación puede aumentar la temperatura y la humedad dentro del aula, y eso, a su vez, puede afectar a la atención y generar alumnos de bajo rendimiento.
En el estudio, los investigadores de Harvard y UCLA concluyeron que las temperaturas elevadas dentro del aula, así como con el simple aumento de 1,8 ºC, pueden reducir el rendimiento del aprendizaje en un 1 %.
Y cuanto más elevada es la temperatura, más decae el rendimiento de los alumnos, pudiendo llegar a afectar a las habilidades motoras y la capacidad de pensamiento. También puede ocurrir algo similar cuando las temperaturas descienden más allá de lo normal.
En cuanto a la humedad interior, los investigadores comprobaron que, con un nivel de humedad inferior o mayor a lo habitual (40 %), los alumnos se empezaban a sentir incómodos y distraídos.
En el experimento se compararon dos aulas. En la primera, se aumentaba y reducía la humedad en un 20 %, mientras que, en la segunda, se mantenía estable. Los resultados fueron claros: la fatiga en los alumnos que permanecieron en el aula donde el grado de humedad era estable se redujo en un 23 % y el grado de distracción descendió un 61 %.
¿Cómo debe ser el sistema de ventilación para un aula?
Como hemos comprobado, la ventilación en colegios y, como consecuencia, la calidad del aire interior tiene un impacto significativo en el rendimiento de los estudiantes. Además, no hay que olvidar que la ventilación de las aulas es fundamental a la hora de prevenir la transmisión de enfermedades respiratorias o la aparición de problemas respiratorios como el asma.
A pesar de todos los efectos contrarios que puede provocar un mal sistema de ventilación en centros educativos, tanto a nivel académico como a nivel de salud, la mayoría de ellos no le presta la suficiente atención. Y aunque se establecen unas consignas respecto a la limpieza y ventilación natural, la solución puede ser insuficiente.
Gran parte de los colegios no disponen de un sistema de ventilación mecánico adecuado o simplemente no cumplen con las normas de calidad del aire interior. Esto puede ser debido a la falta de recursos, a la falta de conciencia sobre la importancia de la calidad del aire o a una combinación de ambos.
Por este motivo, la AFEC (Asociación de Fabricantes de Equipos de Climatización), basándose en los consejos de la OMS y en el RITE (Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios), lanzaron una guía donde se aglutinan las principales recomendaciones para la mejora de la ventilación en colegios. Entre los distintos puntos, destacan:
- Sistema de ventilación: los edificios no residenciales construidos a partir del año 2007 deben disponer de sistemas de ventilación mecánica.
- Temperatura: en invierno, la temperatura debe ser de entre 21 °C y 23 °C, mientras que, en verano, estará entre los 24 °C y 26 °C.
- Caudal de aire: el sistema de ventilación debe asegurar un caudal mínimo de renovación de aire de 45 m³/hora y persona. En el caso de las guarderías, este valor aumenta hasta los 72 m³/hora por persona.
- Ventilación natural: la ventilación natural no es no suficiente por sí sola, especialmente, en climas fríos o muy cálidos, donde abrir las ventanas puede resultar incómodo. Por ello, se aconseja contar con sistemas de ventilación mecánica que aseguren la renovación constante del aire.
- CO₂: Se recomienda instalar sondas de CO₂ para medir y monitorizar su concentración y así poder actuar en consecuencia. Esta medida debe rondar los 400-420 ppm de CO₂
- Filtros: los equipos de ventilación mecánica deben incluir filtros ePM1 y prefiltros ePM2.5.
- Humedad: la humedad relativa del ambiente debe mantenerse siempre dentro del rango del 40 y 60 %.
- Mantenimiento: se debe realizar un mantenimiento proactivo de los sistemas de ventilación mecánica para asegurar su correcto funcionamiento a lo largo del tiempo.
¿Qué opciones existen para mejorar la ventilación en los colegios?
Ante las dificultades que pueden suponer para los alumnos una incorrecta ventilación en los colegios, así como la inefectividad de las medidas de ventilación naturales en ciertas épocas del año, la instalación de un sistema de ventilación mecánica se presenta como la mejor opción a todos los niveles.
Entre las múltiples opciones disponibles, la que mejor resultados ha demostrado ofrecer es la ventilación mecánica de doble flujo con recuperación de calor. Este sistema incorpora un intercambiador de calor que permite conservar la temperatura interior mientras se renueva el aire, lo que resulta especialmente útil en climas fríos o muy cálidos.
Además, estos sistemas suelen incorporar filtros que mejoran la calidad del aire, así como sensores que monitorizan los niveles de CO₂ y ajustan automáticamente el flujo de aire, esto es muy conveniente en zonas cálidas y secas dónde se presentan fenómenos meteorológicos como la calima. A pesar de que existen otras soluciones más económicas, la instalación de un sistema de este tipo es la mejor opción a largo plazo, ya que ofrece un equilibrio óptimo entre eficiencia energética y calidad del aire.
Dentro de los sistemas de ventilación mecánica se podrá seleccionar un sistema centralizado o descentralizado en función del presupuesto, plazo y tipo de obra o reforma que se pueda realizar en el centro.
Especialmente ideado para centros educativos y espacios de trabajo, Soler & Palau ha desarrollado el sistema PURECLASS. Esta unidad de ventilación descentralizada no requiere de instalación de conductos ya que la distribución del aire se hace desde el mismo equipo de recuperación de calor y cada unidad sirve a una zona específica.
Si quieres mejorar la calidad del aire en tu centro educativo, no dudes en contactarnos. En Soler&Palau, estamos comprometidos en crear entornos de aprendizaje saludables y productivos para todos los estudiantes.